Quien se mantenga firme hasta el fin, se salvará

“Yo siempre digo a los jóvenes: Sueño todo lo que quiera, pero después trabaja con constancia, con perseverancia, tenaz, desesperadamente...”, dijo el científico inmunólogo M. Patarroyo, descubridor de la primera vacuna contra la malaria, que ha dado generosamente a la Organización Mundial de la Salud.

Un periodista preguntó al premio Nobel de Literatura Camilo José Cela: "¿Cuándo le llega la inspiración?" Él le respondió: “¿Qué inspiración? ¡Trabajo, trabajo y trabajo! Tienes que saber que me levanto a las 6 de la mañana. A las 7 me pongo a trabajar. A veces no se me ocurre ninguna cosa, pero no salgo del despacho.”

“¿Qué hay más duro que la piedra y más blando que el agua? Y, sin embargo, el agua ablande la piedra”, escribió el poeta clásico Ovidi.

El gran músico Stravinsky confesaba que "su mayor felicidad era encontrar la nota exacta en su piano, después de horas y horas de búsqueda desesperada."

Y es que la constancia es la fuente de cualquier acierto y éxito.

Perseverar, tener constancia, es:
– mantener el esfuerzo sin cansarse,
– insistir con tesón hasta conseguir algo, un objetivo, un ideal, un fin.

Jesús dice: "El que se mantendrá firme hasta el fin, se salvará".

JOSEP M. ALIMBAU